¿Qué son la Hepatitis C, Hepatitis B y VIH?
La enfermedades de Hepatitis C, Hepatitis B y VIH son enfermedades de transmisión sexual cuyo diagnóstico debe ser realizado mediante análisis de sangre.
¿Qué es el test ETS/+ y cómo funciona?
El test ETS/+ es un conjunto de pruebas diagnósticas encaminadas a valorar la presencia de agentes causantes de enfermedades de transmisión sexual en muestras de mucosas o lesiones, por lo que no incluye la valoración de estas 3 infecciones virales.
Sin embargo, este test es adecuado para el diagnóstico de otras enfermedades de trabsmisión sexual como por ejemplo:
- Treponema pallidum (Sífilis)
- Neisseria gonorrhoeae (Gonorrea)
- Trichomonas vaginalis
- Chlamydia trachomatis
- Chlamydia trachomatis (cepas Linfogranuloma venéreo)
- Herpes simplex I
- Herpes simplex II
- Mycoplasma hominis
- Mycoplasma genitalis
- Ureaplasma urealyticum
- Ureaplasma parvum
- Haemophilus ducreyi
- Cytomagalovirus
- Virus Varicela zoster
- Papiloma Virus Humano (HPV)
Es importante conocer que enfermedades como la Hepatitis C, la hepatitis B o el VIH son consideradas enfermedades de transmisión sexual, pero deben ser diagnosticados mediante análisis de sangre, por lo que no serían detectadas mediante el test ETS/+.
¿Cuándo es aconsejable realizarse una prueba para descartar estas 3 infecciones?
Ante un contacto de riesgo, es aconsejable descartar la posible infección por alguno de estos patógenos. Si ha tenido relaciones sexuales sin protección y/o cree que puede estar en riesgo consulte a su médico para que le oriente sobre el modo de proceder.
¿Es posible tener una enfermedad de transmisión sexual y no saberlo?
Sí, es posible. Muchas enfermedades de transmisión sexual pueden tardar semanas, meses o incluso años en manifestar sus síntomas. Algunas personas nunca desarrollan síntomas, pero incluso en este caso, la persona infectada puede transmitir la enfermedad a otra persona.
Síntomas más comunes de las enfermedades de transmisión sexual
Las enfermedades de transmisión sexual pueden causar síntomas físicos como granitos, lesiones en la piel, picazón, dolor o ardor al orinar, fiebre, o síntomas de malestar como el de la gripe.
Sin embargo, estos síntomas pueden ser causados por otras enfermedades comunes por lo que pueden ser confundidos. También cabe tener en cuenta que algunas ETS pueden no manifestar síntomas en la persona que las padece.
